¡Lasaña deliciosa y llena de sabor. ¡Disfruta de esta experiencia culinaria con Pragná!
Tiempo de preparación: 2 horas
Tiempo de cocción: 40 minutos
Ingredientes
Para la salsa boloñesa:
- 500 g de carne molida (res o cerdo)
- 1 cebolla, picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 1 lata (400 g) de tomate triturado
- 2 cucharadas de puré de tomate
- Sal con Ajo “Pragná” al gusto
- Finas Hierbas “Pragná” al gusto
- Pimienta Negra “Pragná” al gusto
- Aceite de oliva para cocinar
Otros ingredientes:
- Láminas de lasaña precocidas
- 3 tazas de queso mozzarella, rallado
- 1 taza de queso parmesano, rallado
¡Manos a la obra!
- Para esta receta comenzamos preparando la salsa boloñesa, calentamos el aceite de oliva en una sartén grande, para después pasar a cocinar la cebolla y el ajo hasta que estén dorados.
- De a poco iremos agregando la carne molida y cocinamos hasta que se dore. Añadimos el tomate triturado, el puré de tomate, la sal con ajo Pragná, las finas hierbas Pragná y la pimienta negra Pragná. Cocinaremos a fuego lento durante 20-30 minutos.
- Mientras el horno se precalienta a 180°C, en un molde para horno, colocamos una capa delgada de salsa boloñesa y ponemos las láminas de lasaña encima de la salsa y agregamos una capa de queso mozzarella y parmesano. Repetiremos estas tres capas hasta que se agoten los ingredientes, terminando con una capa de queso.
- Cubrimos la lasaña con papel de aluminio y horneamos durante 25-30 minutos.
- Pasamos a retirar el papel de aluminio y a hornear por 10 minutos adicionales, o hasta que el queso esté burbujeante y dorado.
- Dejamos reposar la lasaña de 5 a 10 minutos antes de cortarla. Y listo, ¡Disfruta de tu deliciosa Lasaña Boloñesa con un toque especial de Sal con Ajo, Finas Hierbas y Pimienta Negra Pragná! ¡Buen provecho!
¡Tips!
- Ajusta la cantidad de la sal con ajo, las finas hierbas y la pimienta Negra Pragná, según tu preferencia de sabor. Estas especias pueden realzar el perfil de la salsa boloñesa.
- Cubrir la lasaña con papel de aluminio durante parte del tiempo de horneado ayuda a evitar que el queso se dore demasiado rápido, permitiendo que las capas interiores se cocinen adecuadamente.